Mira.

 

Mira todo lo que crece en su silencio perfecto.

Mónica Ojeda.

Se que no todo es posible, anoto después de despertar en la madrugada tras un sueño que no recuerdo. ¿Los caballos ven a los muertos?, no hay nada que desee en este momento, el presente se traduce a mi infancia de sueños de otros tiempos, una mente cansada a mis cortos cinco años. Vivo dos vidas, la de mi sueños donde he sido adulto desde mi nacimiento, y la presente donde escribo, estoy llegando en la realidad a la edad de mis sueños. Ese malestar alérgico al frío es porque mi realidad se une a la de mis pensamientos, todo eso sucede en silencio, sin que nadie pregunte, sin que nadie observe.